Asus debuta con sus primeras placas base USB 3.0

Tanto la Xtreme Design P7P55D-E, como la P7P55D, se comercializan con puertos USB 3.0, y ambas se basan en el socket LGA1156 de Intel para procesadores Core i7 y Core i5.

Las nuevas placas base de Asus son un tanto peculiares, ya que a pesar de contar con el soporte de conexiones USB 3.0, siguen basando su arquitectura en el chipset P55 Express de Intel, el cual no soporta la nueva especificación. De este modo, Asus se ha visto obligada a integrar un controlador adicional para contemplar esta posibilidad. Y es que en sucesivas ocasiones hemos destacado que el año 2010 será previsiblemente el del despegue definitivo de la nueva especificación USB 3.0, a pesar de que Intel indicara hace unos días que no va a contemplar la controladora en sus chipsets hasta bien entrado el año 2011.

Los modelos comercializados, indicados anteriormente pertenecen a la serie Xtreme Design de Asus. Ambas cuentan con características exclusivas de tecnología híbrida, como son Hybrid Processor, Hybrid Phase e Hybrid OS, para dotar al sistema de prestaciones adicionales, refrigeración activa y acceso a aplicaciones on-line de forma instantánea con Express Gate.

Entre sus especificaciones destaca por sus 2 puertos SuperSpeed USB 3.0, una elevada cantidad de puertos USB 2.0 (hasta 10), 2 zócalos PCIe 16x para admitir cualquier solución de tarjeta gráfica, así como seis puertos para dispositivos SATA que ofrecen velocidades de 3 GB/s. Viene con zócalo LGA1156 para admitir procesadores Intel Core i7, Core i5 y Core i3, así como cuatro módulos de memoria DDR3 2200. Dado los componentes integrados, el rendimiento puede ser muy similar al ofrecido por la Asus P7P55D Deluxe, analizada recientemente y publicado dicho análisis en nuestra revista PC World Nº 268, correspondiente al mes de octubre.

El precio estimado de las placas se encuentra en los 299 dólares, y con el kit se incluyen los drivers correspondientes para el sistema operativo Windows 7.

Asus destaca en su página Web que las primeras pruebas llevadas a cabo con las placas revelan unos resultados excelentes. Por ejemplo, la transferencia de una película de 20 GB puede llevarse a cabo en menos de 70 segundos, mientras que una canción típica de 4 MB conlleva tan sólo 1 nanosegundo.